Pesadillas y terrores nocturnos
Empezaré con una frase tranquilizante: las pesadillas y terrores nocturnos son normales y comunes a partir de los 2 años y desaparecerán con el tiempo. Mientras tu hijo duerme plácidamente, su sueño pasa por una serie de fases con una actividad cerebral particular. Veamos las particularidades de cada una.
FASE, ¿CUÁNDO OCURRE?
Las pesadillas ocurren durante la segunda mitad de la noche en fase REM.
Los terrores nocturnos ocurren durante el primer tercio de la noche en la fase NO REM.
DEFINICIÓN
Pesadillas: son parte del desarrollo normal de un niño en pleno crecimiento y es una forma de expresar las experiencias vividas. Saben bien lo que les asusta y lo reproducen mientras duermen.
Terror nocturno: no se considera un sueño sino un episodio de terror, una reacción de miedo que se da cuando se pasa de la fase de sueño más profunda NO REM a la más superficial del sueño REM. La inmensa mayoría de las veces esta transición se pasa de manera suave pero hay veces en que el niño se altera, se asusta y tiene lugar el terror nocturno.
CONDUCTA DEL NIÑO
Pesadilla: están asustados y les cuesta muchísimo volver a conciliar el sueño.
Terror nocturno: gritos, patadas, pánico, sonambulismo, palizas. El niño está muy asustado pero no se le puede consolar o despertar, tiene los ojos abiertos pero no sabe que sus padres están ahí y no suele recordar nada al día siguiente.
REACCIÓN PADRES
Pesadilla: acude siempre a su habitación de forma tranquila con una voz suave para mimarle, consolarle y darle seguridad. Al día siguiente, habla con él sobre la pesadilla para saber qué le asusta y no le expongas a películas con episodios de miedo. Durante la rutina háblale de cosas que le gusten. Dale una mantita o un juguete que le guste y le aporte consuelo.
Terror nocturno: es normal que los padres se asusten porque encuentran a sus hijos fuera de sí, como poseídos, no reaccionan a tus palabras y parecen ausentes. Repito, es totalmente normal asustarse. Pero debes mantener la calma y ayudar a que vuelva al sueño normal, no intentes despertarlo. Abrázalo si parece ayudarle y nunca le grites o le sacudas. Durante un terror nocturno, el niño puede hacerse daño con algo, así que protégele de las lesiones. A los 20 minutos los terrores nocturnos suelen acabar, así que dale un beso de buenas noches y mañana no le hables de este episodio.
CÓMO PREVENIRLOS
Pesadillas + terrores nocturnos:
Reduce su estrés o ansiedad.
Asegúrate que duerme lo suficiente durante el día si todavía hace siestas, déjale dormir un poco más tarde por la mañana o acuéstalo antes. Muchos de estos episodios están muy ligados al cansancio a causa de no dormir lo suficiente.
Haz una rutina relajante, simple, hablándole de algo que le gusta, sonriendo, leyendo cuentos sin monstruos, muchas caricias, etc.
Evita que vea la televisión por lo menos 1 h antes de irse a la cama.
CONSEJOS
No llevarlos a tu cama por muy tentador que sea para no generar este hábito y que luego haya que trabajar para quitárselo.
No busques a los monstruos debajo de la cama ni en los armarios. No existen y punto.
Usar siempre el humor sin reírte de ellos. Puedes usar frases como “qué gracioso eres, ¿una bruja en tu habitación?", “qué imaginación tienes cariño, ¿cómo va a ver un monstruo en el armario si no existen?”
Espero que os haya quedado claro y qué sepáis cómo actuar en cada situación. Si tenéis preguntas, no dudéis en preguntarme.